Algunos lo calificaron como el golpe del siglo. El 13 de noviembre de 2011, un grupo de ladrones se coló en el recinto del Puerto de Málaga y escamoteó, con nocturnidad y alevosía, 169 kilos de droga, de los que 121 eran cocaína. La policía detuvo por el robo a cinco supuestos integrantes de la banda del ‘Niño Sáez’, para los que la Fiscalía pedía penas de casi 80 años de cárcel.
Fuentes judiciales argumentaron el fallo absolutorio en que «no ha quedado debidamente acreditada la perpetración del delito». Sólo uno de los acusados ha sido condenado, pero no por el asalto al depósito de laSanidad Exterior de la Subdelegación del Gobierno, que entonces estaba emplazado en el Puerto de Málaga, sino por falsedad documental, ya que llevaba el carné de otra persona cuando fue arrestado por la policía. Se le ha impuesto una pena de nueve meses de prisión y una multa de 1.500 euros. A Francisco Martín Sáez también se le acusaba del mismo delito porque portaba un documento falso cuando fue detenido en Marbella, aunque con su muerte desapareció cualquier responsabilidad penal en la causa.
Los cinco procesados se sentaron en el banquillo el pasado mes de marzo. La Fiscalía, en su escrito de acusación, sostenía que la víspera del asalto se desplazaron a Málaga «para examinar el lugar y todos los movimientos que tenían planificados». Según el Ministerio Público, la madrugada siguiente «inutilizaron el sistema de vigilancia del perímetro exterior y penetraron en el almacén rompiendo la cerradura principal». Una vez dentro del depósito –acusaba la Fiscalía– anularon también sus sistemas de alarma y lograron acceder a la cámara acorazada donde se guarda la droga, donde desaparecieron 169 kilos de distintas sustancias estupefacientes; 121 eran de cocaína, uno de heroína y el resto, drogas de diseño.
Tras la sentencia absolutoria, el robo del depósito del puerto sigue sin esclarecerse y la droga, sin haber sido recuperada.